Después de miles de kilómetros, ya están allí, en Isla Decepción.
Una costilla de ballena, como mesa improvisada, nuestra ginebra, nuestro Brandy y la compañía de todas las personas que cada día trabajan en la investigación científica multidisciplinar de todos los mares y océanos de nuestro planeta.
Y qué orgullo sentimos de ser españoles. 🇪🇸
Gracias al comandante, D. J.Emilio Regodón Gómez por su amabilidad y estas fotos tan especiales.